Las fiestas navideñas son sinónimo de convivencia, cenas deliciosas, brindis y desvelos. Pero, aunque nuestro ánimo suba, nuestra piel puede resentirlo con los excesos navideños.
Si en estas fechas te excediste con los hidratos, el alcohol o el desvelo, no estás sol@: es una de las épocas donde más vemos piel apagada, brotes y deshidratación.
A continuación, te explicamos qué sucede realmente en tu piel después de los excesos navideños y cómo recuperarla.
Excesos navideños: impactos en tu piel
1. Exceso de hidratos y azúcares: glicación y brotes
Durante las cenas decembrinas solemos consumir más carbohidratos y azúcares de lo habitual: panes, postres, pastas, bebidas dulces…
Este exceso provoca un proceso llamado glicación, que ocurre cuando el azúcar se une a las proteínas de tu piel (como el colágeno y la elastina) volviéndolas más rígidas y menos funcionales.
¿Qué notas en tu piel?
- Piel más apagada o inflamada
- Aparición de granitos o brotes
- Líneas finas más visibles
- Sensación de textura irregular
Cómo ayudarla
- Incrementa tu hidratación y consumo de antioxidantes (vitamina C, frutas, verduras).
- Usa productos con niacinamida, retinol o vitamina C para mejorar textura y luminosidad.
- Reduce paulatinamente la ingesta de azúcar en los siguientes días.
2. Alcohol: deshidratación y piel más sensible
El alcohol es un diurético, lo que significa que aumenta la pérdida de agua en tu cuerpo y, por ende, en tu piel. Además, provoca vasodilatación, haciendo que algunas personas presenten rojeces, inflamación o sensación de ardor.
¿Qué notas en tu piel?
- Piel seca o tirante
- Ojeras más pronunciadas
- Inflamación
- Piel sensible o enrojecida
Cómo ayudarla
- Bebe agua abundante los días posteriores.
- Aplica mascarillas o sueros hidratantes con ácido hialurónico.
- Evita exfoliaciones agresivas; prefiere fórmulas calmantes con centella asiática o aloe vera.
3. Falta de sueño: piel apagada y sin reparación
Las posadas, familiares, intercambios y celebraciones pueden venir acompañadas de menos horas de sueño. El problema: la noche es cuando la piel realiza la mayor parte de su regeneración.
¿Qué notas en tu piel?
- Aspecto cansado
- Pérdida de luminosidad
- Bolsas u ojeras marcadas
- Mayor producción de sebo o desorden en la barrera cutánea
Cómo ayudarla
- Prioriza 7–8 horas de sueño durante la primera semana del año.
- Incorpora sueros reparadores nocturnos (péptidos, retinoides, ceramidas).
- Masajes faciales suaves para drenar y desinflamar.
4. Clima frío + calefacción: desbalance en la barrera de la piel
A lo anterior se suma el clima invernal y el uso de calefacción, que resecan aún más la piel y pueden alterar su barrera protectora.
¿Qué notas en tu piel?
- Enrojecimiento
- Sensación de picor
- Piel áspera
- Mayor tendencia a la irritación
Cómo ayudarla
- Usa cremas nutritivas con ceramidas, escualano o manteca de karité.
- Evita duchas muy calientes.
- Añade un humidificador si usas calefacción interior.
¿Cómo recuperar tu piel después de los excesos navideños?
- Hidrátate (agua + alimentos ricos en agua).
- Rutina sencilla y calmante durante 3–5 días.
- Evita exfoliar en exceso.
- Incluye antioxidantes por la mañana.
- Retoma el retinol gradualmente si lo usas.
- Protector solar todos los días, sin excepción.
Disfrutar sí, pero con balance
No te castigues por disfrutar las fiestas, es completamente normal que la piel muestre señales después de días intensos. Lo importante es darle un respiro, hidratarla y retomar tu rutina poco a poco.
Con cuidados adecuados, tu piel puede volver a lucir luminosa, fresca y equilibrada en pocos días.
Siempre recuerda consultar con tu dermatólogo de confianza antes de iniciar cualquier tratamiento o rutina de cuidado de la piel. Tu salud merece atención profesional.
