El paso del tiempo, seas hombre o mujer, no afecta por igual a todos los tipos de tez. Por eso, es importante reconocer a qué grupo pertenecemos y qué tipo de piel es más propenso a desarrollar arrugas para poder trabajar su prevención.
Tipo de piel y arrugas
Pieles grasas
Si eres de los que has tenido la piel grasa en tu juventud (a pesar de que lo granos te llevaran de cabeza), ¡estás de suerte! Ya que este tipo de piel mantiene, durante más tiempo, el aspecto lozano. La producción de sebo (aceite natural que lubrica la piel) se encuentra en su máximo nivel de producción en la adolescencia y se va reduciendo, poco a poco, con el paso de los años. Para el cuidado de este tipo de piel, se recomiendo emplear aceites ricos y volátiles como los que provienen del aguacate y de las semillas de melocotón.
Pieles normales o mixtas
Las pieles denominadas normales o mixtas se caracterizan por tener una buena elasticidad en general y responden bien a los tratamientos anti-arrugas. Estas pieles son muy agradecidas, tan solo con una buena alimentación y unos cuidados convencionales notan mejoría.
Pieles secas
Las pieles secas, al contrario que las grasas, pueden parecer más atractivas durante la juventud ya que por ellas no asoman ni poros abiertos, ni granos. Pero son las que más se deterioran y peor envejecen con el paso del tiempo. ¿Por qué? Porque las glándulas sebáceas, situadas debajo de la superficie de la piel, no producen la cantidad suficiente de sebo o lubricante natural. Este tipo de piel es muy sensible y delicado y necesitará de tratamientos específicos para su cuidado.
Pieles delicadas
Son las más problemáticas. Ya sea por un problema puntual o mantenido en el tiempo, como es el caso de las rojeces. Por ello, al tratar de prevenir las arrugas en este tipo de pieles, hay que comprobar previamente las posibles reacciones ante cualquier tratamiento. ¿Cómo? Haciendo una primera prueba con poco producto en una parte del cutis y ver si reacciona negativamente o no.
Son muchos los factores que afectan a nuestra piel en cuanto a la aparición de arrugas se refiere. Hasta los tipos de gestos que hacemos provocan, más o menos, arrugas como te contamos aquí. Por ello, tratamientos como nuestro Lifting facial o Rejuvenecimiento facial 360º son, muchas veces, necesarios para devolverle a nuestra tez la vitalidad y tersura que una vez tuvimos.
Fuente: antiaginggroupbarcelona