Todas hemos sentido alguna vez cómo nuestra piel cambia con nuestro ciclo menstrual. Y es que, a parte de los cambios de humor, los cólicos o las cefaleas, nuestra piel también se ve afectada por nuestro periodo menstrual y hormonal. Pero, ¿sabemos exactamente a qué se deben estos cambios? Sigue leyendo y te contamos no sólo lo anterior, sino también consejos y tips para paliar estos cambios en nuestra dermis.
Nuestro ciclo menstrual se basa en la acción de diferentes hormonas que actúan en nuestro sistema reproductor y en todo nuestro cuerpo. Son básicamente los estrógenos y la progesterona, los culpables de todo lo que nos ocurre en cada ciclo. Los estrógenos, las conocidas como hormonas femeninas, actúan en nuestro organismo entre los días 10 y 16 de nuestro ciclo y la progesterona, por otro lado, tiene su punto más álgido en el periodo tras la ovulación y durante la menstruación. Dicho de otra forma, nuestro periodo menstrual tiene una duración aproximada de 28 días; los días del 1 al 10 corresponderían con la menstruación, regida por la progesterona, luego del día 10 al 16, una subida importante del nivel de estrógenos sucedida por el periodo de ovulación -punto álgido de los estrógenos y comienzo de su descenso- para terminar con los días premenstruales donde reina la progesterona en nuestro organismo.
¿Cómo cambia tu piel?
Desde el inicio del periodo fértil y los 25 años siguientes, nuestro organismo no cesa en la producción de esta hormona
En todo este revuelo del nivel de hormonas se generan cambios en nuestra piel y en el resto de nuestro cuerpo. Los estrógenos, por un lado, están relacionados con la hidratación y la producción de colágeno en la piel. Desde el inicio del periodo fértil en la mujer y los 25 años siguientes, nuestro organismo no cesa en la producción de esta hormona. Su cese indicaría el comienzo de la menopausia. Podría decirse, que esta fase es la idónea para nuestra piel y luce un aspecto mucho más saludable y luminoso, al contrario de lo que ocurre tras la ovulación y durante la menstruación. En estas fases predomina la progesterona, una hormona que acelera la producción de sebo y la aparición de espinillas y puntos negros. Además, durante estos días el cuerpo tiende a acumular agua para hacer frente a las pérdidas de líquido durante la menstruación; es por ello, que este periodo está regido también por la retención de líquido y pérdida de hidratación de la piel.
Compensar la pérdida de hidratación
Pero, ¿cómo tratar nuestra piel según el momento de nuestro ciclo? Es muy fácil. Al inicio de nuestro ciclo, entre los días 1 y 10, nuestra piel tenderá a ser más seca, debido a la pérdida de líquido que ocurre durante la menstruación. Por esta razón, es aconsejable no probar nuevos cosméticos ya que pueden causar irritación en la piel. Lo ideal es centrase en dotar a la piel de toda la hidratación que necesita durante esta etapa; utilizar cremas con alto contenido en ácido hialurónico y agua termal es un acierto seguro.
Protección solar
Durante el periodo de subida de estrógenos, el único cuidado extra que debes realizar es la extrema protección solar, ya que la alta cantidad de estrógenos en sangre favorece la aparición de manchas solares. En este periodo es ideal realizar los tratamientos estéticos, debido a que la piel se recupera y se cura rápidamente defendiéndola de bacterias, virus y agentes patógenos.
Grasa bajo control
También nuestra piel se ve afectada por nuestro periodo menstrual
En la fase de subida de progesterona debemos cambiar nuestro cuidado facial y adaptarlo a sus inconvenientes. Tendremos que evitar los cosméticos con sustancias grasas, ya que pueden empeorar esta situación, a la vez que debemos evitar los tratamientos invasivos debido a una menor protección de la piel frente a bacterias. Es importante no olvidar utilizar un tónico mañana y noche para restablecer el pH de nuestra piel y desinfectarla.
También es muy recomendable utilizar una crema o emulsión con efecto mate para mitigar los signos de exceso de sebo en la piel. El sérum T-zone de Anesi combinando con la emulsión purificante de la línea Dermo Contrôle son ideales para estos días, en los que nuestra piel necesita una ayuda extra.
Cuidados extras
Cuidar nuestra alimentación y beber la cantidad de agua diaria recomendada favorece también a mitigar los efectos de los cambios hormonales en nuestra piel. Tal como dicen, un buen cuidado interior se verá reflejado en nuestro exterior. Por ello, trata de llevar una dieta equilibrada, rica en frutas y verduras y disminuye las grasas saturadas, beber aproximadamente de dos a tres litros de agua al día y hacer ejercicio físico con regularidad.
Fuente: imaginebox.drv.es
